Todo lo que necesitas para empezar a correr es un par de zapatillas. No hace falta alquilar material, ni pagar un cursillo como con el esquí o la escalada. Correr es sencillo, accesible… y sin embargo, cuesta mantenerlo en el tiempo. Cada año, miles de personas se lanzan a correr por primera vez. Muchas lo hacen por salud, para perder peso o reducir el estrés. Pero con el paso de los días, semanas o meses, esa motivación inicial empieza a flaquear. ¿El resultado? Muchos lo acaban dejando. Una de las barreras más grandes no es física, ni logística. Es emocional. Y se llama: correr solo.
Recuerdo una campaña que decía: Running alone sucks. Para mí, es totalmente cierto. Correr solo implica encontrar la motivación una y otra vez sin apoyo externo. Y no siempre es fácil, sobre todo cuando hace frío, llueve o estás cansado.
Según el Running Report 2025 de Sport Shoes1, las principales motivaciones para correr son reducir el estrés, mejorar la salud mental y superarse a uno mismo. Pero para sostener estas motivaciones a largo plazo, necesitamos apoyo2.
En algunos grupos de edad, como el de adultos entre 35 y 55 años, hasta el 40% no sale a correr simplemente porque no tienen con quién hacerlo3. Y eso no solo afecta al inicio, también a la constancia.
Tener un compañero de entrenamiento cambia las reglas del juego. No es lo mismo decirte a ti mismo “hoy no salgo”, que cancelar con alguien con quien ya has quedado.
Ese running buddy no solo te ayuda a salir, también te anima a rendir más. Hay días en los que tú tirarás de él, y otros en los que él te empujará a ti. Este apoyo mutuo crea un compromiso y un vínculo que va más allá del deporte.
Además, correr acompañado te da ese plus emocional: te sientes mejor por ayudar, por compartir el reto y por mantenerte firme en tus objetivos.
Hoy en día, encontrar a alguien con quien correr es más fácil que nunca. En Buddy Pacer puedes descubrir entrenamientos por día, hora, ritmo y zona. Si no encuentras el que se adapta a ti, créalo tú. Seguro que alguien se une.
Ya sea para tus primeros kilómetros, tus tiradas largas del domingo o tus series más duras, correr acompañado te hará disfrutar más del camino.
Bibliografía: